Balenciaga Gate: el fotógrafo de la campaña con niños denunció que recibe amenazas de muerte
En diálogo con The Guardian, el realizador visual a cargo de la campaña Baleciaga Gift denunció amenazas y explicó cómo fue la metodología a la hora de tomar las controvertidas imágenes de menores de edad junto a peluches con indumentaria sadomasoquista.
El fotógrafo Gabriele Galimberti aseguró que recibe amenazas de muerte como consecuencia del escándalo que suscitó la controvertida campaña con niños de Balenciaga, titulada Balenciaga Gift. "Recibo mensajes como 'Sé dónde vivís', 'Vamos a matarte a vos y a tu familia', 'Vamos a quemar tu casa' y 'Deberías quitarte la vida, p... pedófilo'", contó el artista visual en diálogo con The Guardian.
Según el fotógrafo italiano (nacido en 1977 en Val di Chiana, Toscana), el 90 por ciento de los mensajes recibidos provienen de Estados Unidos. Galimberti, conocido por tomar fotografías de niños rodeados de objetos lúdicos, fue quien disparó la campaña en la que menores de diez años posaron junto a osos de peluche con looks sadomasoquistas –vestidos con arneses y chokers de cuero con candados–.
El realizador, que según explicó, no tuvo nada que ver con los elementos elegidos para montar los sets, se desmarcó de la campaña en colaboración con Adidas, en la que aparecieron documentos judiciales sobre pornografía infantil.
Según contó en declaraciones al citado medio inglés, asegura que la tardía respuesta de la firma de lujo no hizo más que manchar su reputación. Tanto es así que aceptar el encargo para la casa española le valió perder la oportunidad de un trabajo para National Geographic e incluso encarar una exposición en la que venía trabajando.
Además, explicó cómo fue la metodología a la hora del shooting: "Las fotos iban directo desde mi cámara a una computadora, y desde allí las enviaban a los directivos de Balenciaga. Cuando decían 'Ok', simplemente reemplazábamos el maniquí con el que trabajamos por un niño real". Tal como dijo en declaraciones con el medio británico, nunca supo "si la persona que aprobaba las fotografías era Demna".
"Escribo emails a Balenciaga todos los días diciéndoles que la gente me está buscando y quiere matarme para que hagan algo al respecto", señaló Galimberti. Y agregó que la única respuesta recibida por parte de la marca comandada por Demna Gvasalia fue "que haga privada mi cuenta de Instagram para limitar el volumen de mensajes amenazantes".

tras la controvertida campaña perdió un encargo para National Geographic y una exposición en la que venía trabajando
Qué dijo Gabriele Galimberti, el fotógrafo a cargo del shooting de la campaña con niños de Balenciaga
A poco de que estalló el escándalo, conocido como #BalenciagaGate, el fotógrafo de National Geographic expresó en un comunicado su punto de vista de los hechos. "Como fotógrafo, sólo se me pidió que iluminara la escena dada, y tomara las fotos de acuerdo con mi estilo característico. Como de costumbre en un shoot publicitario, la dirección de la campaña y la elección de los objetos mostrados no están en manos del fotógrafo”, señaló en un posteo en Instagram.
En ese sentido, Galimberti continuó en su comunicado: "Sospecho que cualquier persona propensa a la pedofilia busca en la web y lamentablemente tiene un acceso demasiado fácil a imágenes completamente diferentes a las mías, absolutamente explícitas en su horrible contenido. Acusaciones como estas se dirigen contra objetivos equivocados y distraen del problema real y de los delincuentes".
Y para despejar dudas, el fotógrafo remató: "Además, no tengo relación con la foto donde aparece un documento de la Corte Suprema. Esa fue tomada en otro set por otras personas y fue asociada falsamente con mis fotos".
Quiénes eran los modelos infantiles de la campaña de Balenciaga
Según se supo, los modelos utilizados en la controvertida sesión de fotos fueron hijos de empleados de Balenciaga. Los pequeños fueron monitoreados en todo momento por sus padres durante el shooting. En ese sentido, Galimberti explicó: "Cuando vieron los osos de peluche, todos dijeron que eran de estética punk. Nadie mencionó que fueron de inspiración BDSM".
Además, el fotógrafo enfatizó que cuando vio los objetos en cuestión no notó nada fuera de lugar: "Sé reconocer si estamos yendo demasiado lejos, pero en esta ocasión confié en ellos y no vi realmente nada malo".
Y continuó: "No es la primera vez que estoy en el ojo del huracán. Cuando publiqué el proyecto The Ameriguns la gente me acusó de ser un loco demócrata que odiaba las armas, pero en aquel caso estaba listo para defenderme de las acusaciones y proclamar que efectivamente estaba en contra de las armas. Pero, cuando alguien te acusa de pedófilo, ¿cómo puedes realmente defenderte?".
