Cava de vinos, quesos, fuegos y un vivero: así es el multiespacio de Christian Petersen y Felicitas Pizarro en Nordelta
Un estudio de TV los cruzó por primera vez, más allá de algún saludo ocasional o de algún evento compartido por casualidad. En 2018, los chefs Christian Petersen y Felicitas Pizarro hicieron el casting –cada uno por su cuenta– para ser jurados de El gran premio de la cocina, reality gastronómico de Canal 13. A los dos, a modo de empujón, les dijeron que el otro ya había dicho que sí. En el ensayo general del programa comenzó, oficialmente, su primer proyecto compartido, con Mauricio Asta como tercer chef observador. Entre vivos y grabaciones (y una pandemia en el medio de las tres temporadas del programa) empezaron a intercambiar ideas y posibles proyectos.
Christian Petersen es chef desde hace más de 30 años: junto a sus hermanos está al frente de Los Petersen Cocineros, reconocido servicio de catering de eventos, comedores universitarios y ejecutivos. Fue conductor de varios programas en Utilísima y El Gourmet, es autor del libro Al hueso! y el emprendedor detrás de Hermanos, P_Milas y La Valiente, entre otros proyectos gastronómicos. Felicitas Pizarro ganó, en 2013, el concurso internacional de cocina que realizaba el cocinero inglés Jamie Oliver, con el que tomó impulso su carrera como chef, que se sumaba a su formación como sommelier. Condujo programas en El Gourmet, publicó dos libros (YouCook y Cocina feliz) y fue parte del equipo local de Tastemade.

De la pantalla a la vida real, apareció la propuesta que los terminó de unir: los dueños de Ilva, una empresa argentina especializada en porcelanato, fueron a probar las medialunas y el pan de La Valiente, la panadería que Petersen había abierto en el Bajo de San Isidro junto a Germán Torres y de la que la compañía había sido proveedora durante la obra. Al plan de inaugurar un multiespacio en Nordelta (Av. Agustín M. García 7265, Ruta 27) le sumaron que tuviera un vivero y gastronomía. “Con ese lugar como punto de partida, pensamos juntos una experiencia”, cuentan sobre la incorporación de La Valiente (en versión focaccería, que ya abrió) y Maíz, el espacio de vinos, quesos y fuegos que desde septiembre encabezará Pizarro (y será su primer emprendimiento gastronómico en un local abierto al público).
–¿Por qué decidieron encarar este proyecto a la par?
Christian Petersen: –Cuando decidí abrir ahí el tercer local de La Valiente –que será, sobre todo, una focaccería– pensé en cómo acompañarlo. ¿Qué mejor que el vino y el queso? Feli es sommelier, tiene otra mirada de la gastronomía y otra forma de hacer las cosas, hay platos que los hace más ricos que yo (se ríen). Además, nos pasaba cuando estábamos los tres, con Mauri Asta, que todo se potenciaba y era mucho más alegre. Me pareció una buena oportunidad hacer esto juntos.
Felicitas Pizarro: –Siempre admiré esa capacidad de Chris de pensar, diagramar, gestionar y ejecutar un proyecto de la nada. Yo le había contado que mi próximo paso era armar algo propio, quería poner en juego mi cocina y mi rol de sommelier también. Un día me comentó esta idea: “Hay lugar para algo más”, me dijo. Para mí era un salto al vacío, pero al estar él tenía un apoyo, veo su confianza y me la contagia. Estar en el mismo lugar para mí va a ser de un gran aprendizaje.

–¿Cómo es la dinámica creativa? ¿Quién empuja, quién vuela más?
C. P.: –La base de todo es que nos llevamos muy bien. Cuando compartimos tiempo, aparecen ideas, tenemos perspectivas diferentes, nos influenciamos positivamente. Creo que yo tengo la experiencia, el empuje, las ganas de emprender y el conocimiento de armar restaurantes y estar en la parte de atrás, gracias al servicio de catering de eventos.
F. P.: –Los dos somos creativos, siempre lo cargo y le digo que él es clásico, pero dentro de lo clásico es supercreativo. A veces yo soy la que busca un sabor nuevo, y a Chris le gustan menos cosas mejor hechas. Tiene esa idea de “hagámosla como nadie”. Y eso para mí también es ser un distinto o un creativo. Se trata de un equilibrio entre los dos.
“En el lugar, si bien tiene entradas independientes, también armamos un espacio central de encuentro en el que seguramente vamos a unir propuestas"
Felicitas Pizarro
–Entre El gran premio de la cocina y estas aperturas también hicieron Dos fuegos en El Gourmet, ahí sí ya cocinando.
C. P.: –Sí, de hecho, Dos fuegos surgió porque había conexión entre nosotros. Decidimos invitar a comer a la presidenta y a algunos directivos del canal, hicimos un asado para decirles que queríamos grabar juntos un programa de fuegos y carnes.
F. P.: –¡Les cocinamos nosotros y funcionó! Lo que creamos para ese almuerzo terminó siendo el programa.

–Si bien cada uno va a liderar su emprendimiento, ¿habrá momentos en el que se crucen?
F. P.: –Maíz va a ser un vivero y cava en el que vas a poder probar vinos, quesos y charcuterie de diferentes partes del país. Pero me pasa a veces que, cuando pruebo un vino, me dan ganas de comer algo calentito, sabroso, jugoso. Entonces ahí aparece el sector de fuegos que armamos afuera, con parrilla, cocina económica, horno de barro, en donde vamos a hacer carnes y vegetales, empanadas, sabores locales muy bien preparados. Quiero hacer de lo simple, lo mejor. En el lugar, si bien tiene entradas independientes, también armamos un espacio central de encuentro en el que seguramente vamos a unir propuestas.
C. P.: –En el asado de obra con el que hicimos una preapertura servimos sanguchitos de falda con nuestro pan, humita, quesos. La idea es que sea un lugar de todos los días, por el que la gente de la zona pase a comprar lo que quiere comer, comparta algo.
F. P.: –Y que de pronto te parezca un buen plan venir un viernes a la noche con tus amigos, o que sea la parada para comprar todo para la mesa del fin de semana.
“La idea es que sea un lugar de todos los días, por el que la gente de la zona pase a comprar lo que quiere comer, comparta algo.”
Christian Petersen

Fotos: Delfina Schoch