De gira por Retiro: 3 bares y la búsqueda de la coctelería perfecta

En esta nueva sección, les voy a proponer recorridos de bares por los diversos barrios de Buenos Aires. Son las giras que suelo hacer para aprovechar una zona y visitarlos de a pie. Les iré contando mis experiencias que espero los alienten a armar su propia aventura.

Hoy la gira es por Retiro, un barrio tan céntrico como chic que al atardecer comienza a bajar el ritmo y permite apreciar su belleza. Caminar por sus callecitas empedradas, observar las antiguas luminarias, los edificios de estilo francés, la gran Plaza San Martín con el hermoso reloj, los imponentes palacios, es una pequeña París en Buenos Aires.

Primera parada: el bar de Oscar Chabrés, una leyenda de la coctelería argentina. Oscar se lució durante años en la emblemática barra del Hotel Claridge donde forjó gran parte de su experiencia y supo atender a una exigente clientela. En 2008 abrió su propio bar ubicado actualmente en Marcelo T. de Alvear frente al Hotel Plaza. La ambientación es tradicional con mucha madera y vitrinas antiguas.

El ambiente, ecléctico: los viejos habitués se mezclan con los nuevos, muchos jóvenes y varios extranjeros que llegan por recomendación. Nunca mejor dicho "atendido por sus propios dueños", Oscar y su familia le aportan una calidez única. Ni hablar del expertise de este barman de la vieja escuela siempre dispuesto a una linda charla.

Es un lugar ideal para beber cócteles clásicos como también las creaciones de Oscar. Como la mía iba a ser una noche larga, le pedí uno de su autoría de bajo contenido alcohólico: Maltratado (gin, Cointreau, espumante, Campari, jugo de naranja, jugo de maracuyá y clara de huevo, $950) acompañado de unas tremendas bruschettas de jamón crudo, queso tybo, tomates cherry, aceitunas y albahaca ($1500). Tanto los cócteles como las tapas son realmente generosos, llenan la panza y el corazón.

Para mi segunda visita, tomo la calle Maipú bordeando parte de la plaza hacia el norte para bajar por la sigilosa Basavilbaso. Llego a Basa, un destacado restaurante y bar ubicado en un moderno y elegante subsuelo. Desde la vereda se insinúa la estética minimalista con algo de teatral, una excelente iluminación y la gran barra al fondo.

Es un spot ideal para ir en pareja o con amigos, se ve a la gente disfrutar en pequeños y grandes grupos en las mesas, sofás o en la barra. La cocina es porteña contemporánea a cargo de Leandra Pérez. Al mando de la barra está Gastón Aranda, bartender que fue finalista en la competencia de coctelería World Class. Detrás de la propuesta de Basa están los reconocidos gastronómicos Luis Morandi y Patricia Scheuer (Sucre y Gran Bar Danzón, entre otros). Me deleité con una brochette de langostinos con criolla y alioli ($3660) y un Rotten Apple Punch (Cynar, Martini Rosso, limón, pomelo, sidra y canela, $1020). Los platos principales son para compartir e incluyen una guarnición a elección. Yo opté por el imperdible arroz negro en paellera con pulpo español a la parrilla, chipirones y alioli ($5990) con tagliolini a la manteca trufada y parmesano, una delicia.

De postre, elegí el volcán de dulce de leche con crumble de coco y helado de americana ($1113), no te vas a arrepentir. Para bajar todo le pedí a Gastón un Martini no muy seco y me preparó su Fender Martini (Tanqueray Sevilla –gin cítrico–), Martini dry, Lillet, bitter Angostura orange y una cebollita macerada en Campari y vinagre, para beber y beber. Algo más para destacar es la buena música que suena con DJ en vivo desde la barra y a un volumen que permite charlar.

Para mi tercera parada, subo por la coqueta y parisina Arroyo para llegar a Florería Atlántico, el bar más premiado de la ciudad –actual Nº 5 del mundo y Mejor Bar de Sudamérica 2021 según The World’s 50 Best Bars– del también reconocido Tato Giovannoni. Para acceder, hay que ingresar a la pintoresca florería y vinoteca.

Escalera abajo, se siente llegar al piso de un barco, específicamente al de los marineros. Porque el éxito y la mística de Florería no pasan por el lujo sino por su sólida propuesta, las mezclas originales, el buen producto y por la buena onda que se respira. Su ambiente mezcla porteños de after office con extranjeros ávidos de conocer el multipremiado bar. Para la carta de cócteles Colonias y Pueblos Originarios, un homenaje a los pioneros de nuestra tierra, Tato trabajó en colaboración con Felipe Pigna, cuyas historias detrás de cada trago enriquecen la experiencia. Elegí El dorado (cachaça Yaguara, Jäger Manifest y tereré de la jungla, $1230).

Es suave, apenas dulce. Al beberlo de la hermosa vasija, te sentís que estás tomando un brebaje chamánico. Para acompañar, empanadas de centolla y langostinos ($1020) o crudo de lenguado con palta y radicchio ($2271). Otro también servido en vasija, Aymaras y Quechuas (pisco Calavera, licor de rica y muña muña, bitter de pimento de Cachi, arca, tabac aloja de nopales, papa y quinoa roja, chicha de tres maíces, $1286).

Es evidente la predilección por la diversidad de productos locales. Además, Florería es un buen bar para beber Negronis. Entre sus cinco variedades, se destaca por popularidad el Balestrini (gin Príncipe de los Apóstoles, Campari, Amaro y agua del océano Atlántico, $1466), como para darse un golpe de mar.

Datos útiles

Chabrés Bar

Marcelo T. de Alvear 554, Caba

@chabresbar_ok

Lunes a viernes de 17 a 03 hs. Sábado de 19 a 03.

Reservas por whatsapp: 11-3229-8442

Basa Basement Bar & Restaurant

Basavilbaso 1328, Caba

@basabsas

Lunes a viernes de 12 a 16 y 19 a 01. Sábado de 20 a 02.

Reservas: 11-2460-6045 / 4893-9444

Florería Atlántico

Arroyo 872, Caba

@floreriaatlantico

Lunes a jueves y domingo de 16 a 02. Viernes, sábado y vísperas de feriado de 16 a 02:30.

Reservas sólo para cenar: floreriaatlantico.meitre.com. La barra es por orden de llegada.

Dudas y consultas: pueden escribirme a @drinksbymarazzi