Mate Society: la historia de Samantha Trottier y Hernán Regiardo, la pareja furor de TikTok
Detrás de un video viral puede haber muchas historias: una situación cotidiana graciosa, un gesto solidario, una hazaña deportiva. Pero el detrás de escena del video de Samantha Trottier en el que retrató a su novio durante la semifinal de la Copa América masculina nos remonta no solo a una historia de amor sino también a la creación de un emprendimiento que surgió a partir de una crisis y que hoy les permitió comprarse una casa en Palm Beach, Florida.
El protagonista del video es el santafesino Hernán Regiardo, de 32 años, aunque sus reacciones al encuentro deportivo estarían incompletas sin las caras en primer plano de Sam, su novia estadounidense de 24 años.
El descontrol de reproducciones que tuvo en julio de 2021 se vio reflejado en la interacción del público con otros videos que ella había subido antes. Rápidamente, le encontró la veta a mostrar las diferencias culturales y de idioma que tiene con Hernán como para generar contenido no solo likeable sino que también sirviera de portfolio para futuros clientes.

(Hernán Reggiardo)
“Empezamos con el TikTok hace como un año, pero los primeros cinco o seis meses lo usábamos solo como una diversión. Este año nos dimos cuenta de que había una necesidad de las marcas de usar TikTok y nosotros podíamos ofrecerles ese servicio. Entonces, comenzamos a usar nuestra plataforma para mostrarles que sabemos cómo funciona. Lo usamos más para vender Mate, nuestra agencia”, explica Hernán. Juntos tienen más de un millón de seguidores en esta plataforma.
Mate Society es la agencia creativa de contenidos digitales que fundaron en 2020, a pocos meses de haberse conocido en Indonesia. Él vivía ahí desde hacía un tiempo; llevaba seis años fuera de su Arequito natal entre los meses que recorrió Nueva Zelanda como mochilero y los que vivió en Suecia y Alemania. Se dedicaba al marketing y a la fotografía gastronómica.
Ella, nacida en Dakota del Norte, estaba de vacaciones; cursaba los últimos años de la carrera de Programación en Minnesota y trabajaba en una compañía que poco tiempo después, ya comenzada la pandemia, la incluiría en una reducción de personal. Las restricciones que impuso el coronavirus complicaron también la situación laboral de Hernán y atentaron contra la incipiente relación, aunque solo modificando sus planes. En lugar de que Sam se mudara a Indonesia, como habían soñado en los comienzos del romance, fue Hernán el que se instaló en los Estados Unidos, y eligieron California como destino original.
En menos de dos años, Mate Society ya hizo trabajos de fotografía, animaciones, stop motion y videos para marcas como Procter & Gamble, Lennox, Hello Kitty y Firestone Walker, entre otras 80 más alrededor del mundo. Un panorama alentador teniendo en cuenta sus comienzos.
“El 4 de julio de 2020 empezamos a ofrecer nuestros servicios de fotografía. Yo tenía portfolio de fotografía de moda y restaurantes, que es lo que hacía, pero esas dos industrias estaban supermuertas por la pandemia. Así que lo que hicimos fue empezar a ofrecer fotografía de producto. La categoría se llama Consumer Packaged Goods, que sería todo lo empaquetado que se vende en supermercados. Eran las únicas empresas que en ese momento tenían dinero y estaban vendiendo. Así empezó todo”, recuerda el argentino.
–¿Cuál creen que es el diferencial en el servicio que ofrecen a sus clientes?
Hernán Regiardo: –Ofrecemos un servicio más estilo boutique, nos adaptamos a cada uno de ellos de una forma diferente. Somos muy buenos adaptándonos. Y no nos gusta hacer un proyecto igual que otro nunca, intentamos no repetirnos aunque algo nos haya funcionado en el pasado. También ofrecemos creación de contenido en TikTok, cosa que no mucha gente está ofreciendo para marcas. Muchos lo están haciendo como influencers, pero nosotros creamos contenido específicamente para las marcas.
–¿Cómo organizan el trabajo?
H. R.: –Samantha se encarga de los e-mails, que son más difíciles de contestar en inglés, de la estilización de todas las sesiones de fotos y de la edición de los tiktoks. Yo me ocupo de las fotos.
–Trabajar y vivir juntos suena a mucho. ¿Cómo lo hacen?
H. R.: –La verdad es que hacemos todo juntos, 24/7.
Samantha Trottier: –Y dividimos todo, cincuenta y cincuenta.
H. R.: –Tratamos de que sea bien igualitario, mantener esa dinámica de hacer los dos todo; financiera y laboralmente, y también en el día a día.

–¿En qué se complementan desde lo laboral?
S. T.: –Yo soy más organizada y Hernán es más creativo. Él es más tranquilo y yo tengo más estrés (se ríe).
H. R.: –Ella me ayuda a trabajar un poco más fuerte. Quizás la cultura sudamericana es la de trabajar más relajado, tomarse dos horas para el almuerzo. Ahora, imposible. Nos ayudamos el uno al otro para empujarnos y meterle siempre para adelante. Creo que yo solo no podría tener un emprendimiento con todo lo que conlleva. Ella también se ocupa de todo el tema de los impuestos, cosa que yo odio.
–¿Establecen horarios de trabajo?
S. T.: –No, trabajamos todo el tiempo todos los días. Pero si queremos ir a la playa un miércoles, vamos. Somos flexibles en ese sentido.
H. R.: –Es difícil ponerle límite al horario de trabajo, decir: “A las siete frenamos”. Siempre terminamos trabajando hasta las nueve de la noche en la cocina. Yo llegué hace dos años con 300 dólares y hace un mes compramos una casa. Fue una locura, mucho trabajo en este tiempo. El primer año trabajamos siete días a la semana y nos tomamos un día libre cada dos semanas. Ahora estamos un poco más tranquilos, estamos encontrando una relación un poco más sana con el trabajo.
S. T.: –Pero en la cama, cuando desayunamos, siempre hablamos de trabajo.
H. R.: –Salen ideas en cualquier momento, el trabajo creativo es un poco así.
S. T.: –Y como hacemos tiktoks, cuando miramos videos sentimos que estamos trabajando también.
–Desde lo cultural, ¿encontraron muchas diferencias al momento de trabajar?
S. T.: –Hernán tiene la costumbre de dormir una siesta al mediodía, y para mí eso no es tan normal (se ríe).
H. R.: –También en cuestiones de relación con los clientes: yo trato de ser mucho más cálido y tal vez acá son más fríos. A veces el trato es diferente y se nota.
–¿Qué perspectivas a futuro tienen con Mate?
H. R.: –Siempre adaptarnos a las nuevas plataformas para seguir siendo líderes en cada red social. Nuestro objetivo, cuando empezamos a trabajar con cada cliente, es que tengan más ventas. Return on investment, como se dice acá. Somos muy ambiciosos y estamos siempre en la búsqueda de nuevos proyectos, nuevos conceptos y desafíos.

Fotos: gentileza Mate Society