Día de la Tierra: cuáles son las consecuencias irreversibles del cambio climático
El 22 de abril es el Día de la Tierra. La fecha funciona como homenaje al movimiento de concientización iniciado en la década del 70. Fue el estadounidense Gaylord Nelson quien propuso este día para alertar sobre los problemas de sobrepoblación, contaminación, conservación de la biodiversidad y otras preocupaciones ambientales para proteger la Tierra.
Pasaron 52 años de la primera "celebración" y poco ha cambiado. Pese a lo acordado años atrás para mantener el calentamiento global por debajo de los índices dispuestos mundialmente, las alertas por el cambio climático continúan en rojo: las temperaturas siguen aumentado, generando un caos en nuestro planeta.
Recientemente, se publicó un informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). En el documento, los científicos hacen alusión a que las temperaturas del planeta tierra van a superar los límites establecidos rápidamente. A menos que se reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero en un plazo mucho más inmediato de lo que se había estipulado en un comienzo.

De no tomar medidas inmediatas y continuar incumpliendo con las promesas dadas en función de nuestro medio ambiente, las consecuencias podrían ser catastróficas. El Secretario General de la ONU, António Guterres, brindó una declaración respecto del IPCC y manifestó: “Nos encontramos ante una emergencia climática”.
Además, Guterres consideró que lo revelado en el documento es un registro de la vergüenza que cataloga las promesas que nos están llevando con paso firme hacia un mundo inhabitable. “Vamos camino a un calentamiento global de más del doble del límite de 1,5 grados acordado en París. Algunos líderes gubernamentales y empresariales están diciendo una cosa y haciendo otra. Simple y llanamente: están mintiendo. Y los resultados van a ser catastróficos”, explicó.

Europa y Estados Unidos, en la mira
Las temperaturas aumentaron en más de 1,1 °C, generando que los desastres naturales tales como inundaciones, huracanes, incendios forestales o calores extremos, sean riesgosos no sólo para la vida humana sino también para todos los seres que habitan el planeta.
Según el informe, las emisiones globales proyectadas superan el máximo acordado y dificultan alcanzar el límite de 2°C después de 2030, mientras que las cifras revelan que una gran parte del dióxido de carbono en la atmósfera fue liberado por los países ricos. Los especialistas de la ONU precisaron que un 40 por ciento de las emisiones producidas son de Europa y de EE.UU.

Guterres no dudó en recordar que todos tenemos una deuda con la juventud, la sociedad civil y las comunidades indígenas, quienes han realizado varios llamados de alerta para que se tomen acciones. “Es hora de que dejemos de quemar nuestro planeta y empecemos a invertir en las abundantes energías renovables que nos rodean. La ciencia del clima advierte de que ya estamos peligrosamente cerca de los puntos de inflexión que podrían generar una cascada de consecuencias climáticas irreversibles”, sentenció.

La necesaria transición energética
Hace unos días, el científico de la NASA, Peter Kalmus, se manifestó junto a sus colegas en la entrada de un banco de JP Morgan Chase para advertir al mundo de los peligros generados por estas empresas de gran escala.
Según la explicación brindada por Kalmus, JP Morgan Chase financia la mayoría de los nuevos proyectos de combustibles fósiles y, como explica el nuevo informe del IPCC, las emisiones de la infraestructura de energía fósil actual y planificada ya son más del doble de la cantidad que empujaría al planeta a un nivel de calentamiento global que traerá un calores mucho más intensos, fuegos, tormentas, inundaciones y sequías.
“Preferiría estar con mi familia y hacer ciencia. Pero me siento moralmente obligado a dar la alarma. Cuando cambié la astrofísica por la ciencia de la Tierra en 2012, me di cuenta de que los hechos por sí solos no persuadían a los líderes mundiales para que tomaran medidas", afirmó Kalmus.