Día Mundial del Malbec (#4): consumo diario y alta gama, en un ejemplo de versatilidad
"En la Argentina no hay vinos malos", decía la inolvidable periodista experta en vinos y gastronomía -y escriba superior- Elisabeth Checa. Una afirmación cuya veracidad requiere una simple visita al súper del barrio, donde la convivencia de etiquetas refleja la de diversidad existente, incluso dentro de una misma bodega. Y (casi) todas con un umbral de calidad que arranca en niveles altos.
En ese camino se encuentra Bodegas Bianchi, que, en cuanto a Malbec se refiere (el establecimiento cuenta con 17 etiquetas dedicadas a la emblemática cepa), además de ofrecer experiencias satisfactorias en todas sus líneas ha sabido expandir horizontes partiendo de su patria chica -San Rafael, al sur de Mendoza- a elaborar vinos con uvas del hoy en boga Valle de Uco, al noroeste de la provincia cuyana.
Así, por un lado la bodega presenta el crédito de esta última zona, de gran influencia montañosa por su cercanía con el pedemonte: Gran Famiglia Bianchi Malbec. Un vino con gran intensidad, potencia y vivacidad, con destellos violáceos a la vista, una nariz voluptuosa y pródiga en aromas de frutos rojos, en perfecta armonía con notas especiadas y florales. Hay un buen aporte del roble francés, y la boca se muestra dulce, estructurada, compleja, con buena acidez y frescura. Es un alta gama y se refleja en su precio: $14.500.-
Por el otro, el Finca Los Primos Malbec es aquel que no costará llevar a la mesa diaria por su buena relación calidad/precio. Es un vino joven, vivaz, donde resaltan las frutas rojas y el toque floral, con taninos suaves y redondos lo hacen muy equilibrado. De práctica tapa a rosca, los ejemplares de la línea evocan los primeros recuerdos de la tercera generación de la familia Bianchi Stradella, quienes corrían y vivían sus primeras travesuras en los antiguos viñedos de San Rafael. Su precio sugerido al público es de $4.350.-
