Recomendados EPU- Comer y beber en Buenos Aires: "Florería Atlántico", "Cang Tin" y "Ti Amo"
FLORERÍA ATLÁNTICO
Buenos Aires, se sabe, es una ciudad de grandes bares, pero hay barras con mística propia. Como este subsuelo creado por Tato Giovannoni en la galana zona de Retiro hace una década, que no solo ocupa el puesto 18º en el ranking The World’s 50 Best Bars, sino que también busca refrendarlo constantemente desde su propuesta.
Y la respuesta está a la vista: martes a las 21 y el local ya está a reventar, con gente apiñándose en la barra para pedir tragos de la nueva carta, “Historias de pueblos originarios - Vol. 2”. Del Huarpes (pisco Calavera, agua de río, quinoa, zapallo, raíz de totora, huesos de pato, huesos de pescado, maíz amarillo, $2.280) al Sumak Kawsay (destilado de orujo, vermut rosso y seco, cordial de chañar, bitter), el paseo abarca una decena de cócteles sutiles y equilibrados.
Acompañan sabrosas entradas (muy bien el tostón de boquerones, $2.210) y principales lujosos (buen pulpo con papas, harissa y limón, $9.740), además de varios tragos con las bebidas creadas por Tato como protagonistas (vermuts, vodka, gin Príncipe de los Apóstoles), además de mezclas clásicas. Un verdadero bar de autor.
Arroyo 872, Retiro
@floreriaatlantico

CANG TIN
Siguiendo con el boom de las barras asiáticas (Niño Gordo, Mirutaki, ApuNena), un localcito pegado a las vías de la estación de tren Mtro. Carranza les da la bienvenida a sus comensales con una barra central en forma de U, varias mesitas desparramadas por la vereda, vajilla multicolor y muy buenos aromas.
Se trata de Cang Tin, la creación de José Delgado y Thomas Nguyen (ambos a cargo de la cocina) junto con Pablo Marotta (parte también de Saigón Vietnam), que trae a Palermo lo mejor de la comida viet-thai. Entre sus platos insignia encontramos los arrolladitos Nems de la semana ($2.100); el Pad Thai, un salteado de fideos de arroz con cebolla, nira, brotes de soja y alguna proteína ($3.200 para compartir), y el novedoso Bánh Xeo, una crepe de harina de arroz y leche de coco con hongos, brotes de soja, cilantro, albahaca y otras hierbas (desde $2.700, comen dos).
También pisan fuerte los dumplings, que, si bien no son propios de esa región, no pueden faltar en los restaurantes con esencia asiática. Hay cerveza en lata a base de arroz, sidra embotellada y algún que otro vinito de bodegas boutique.
Dorrego 2415, Palermo
@cang.tin

TI AMO - LA SORELLINA
De Adrogué al mundo: en 2022, las hermanas Victoria y Carola Santoro llevaron a Ti Amo a lo más alto del planeta, cuando la prestigiosa guía culinaria internacional 50 Top Pizza la eligió entre las cien mejores pizzerías napoletanas de la actualidad. A partir de allí, esta factoría made in Almirante Brown no paró de crecer, y a fines del año pasado abrieron su propia embajada porteña: La Sorellina (“la hermanita”, en italiano).
Y así de “chiquita y malcriada”, según palabras de sus dueñas, este local con ladrillos a la vista, poquitas mesas adentro y una buena barra para chusmear los movimientos de la cocina confirma el gran momento de la pizza estilo Nápoles en la Argentina. Fina pero crujiente, con el cornicione dorado y burbujeando, la Margherita fior di latte y parmesano ($2.500) marca el rumbo de la asombrosa calidad de los productos con los que trabajan; la Roma, con mortadella con pistachos, stracciatella y ajíes picantes ($2.800) es cosa seria: merece un lugarcito, entre Diego y San Genaro, en el orgulloso altar de la ciudad italiana más argenta de todas.
Ramón Freire 1393, Colegiales
@tiamopizzabar
