La leyenda continúa
Esta séptima generación, fabricada en México, marca un importante avance en materia de diseño, calidad y tecnología. Se vende en tres versiones de equipamiento, con dos opciones de motorización y cajas manuales o automáticas.
Fabricado en la planta de Puebla (México), esta séptima generación del Golf llega en tres versiones. La inicial es la Trendline, equipada con un motor de 1.6 litro, 110 CV y caja manual de cinco velocidades.
Le sigue la Comfortline, con un interesante propulsor de 1.4 litro, TSI BlueMotion de 140 CV y dos opciones de transmisión: una manual de seis velocidades y otra automática DSG, de siete marchas.
Finalmente, la Highline, también con un motor de 1.4 litro, TSI BlueMotion de 140 CV, aunque sólo con caja automática SDG de siete velocidades.
En algunos meses arriba la versión GTi, equipada con el motor de 2.0 litros, 220 CV y caja automática DSG de seis velocidades, por un lado, y las versiones Variant, por el otro. Todas estuvieron expuestas en el Salón Internacional del Automóvil de Buenos Aires.
En su aspecto exterior, lleva plasmado el ADN del diseño de Volkswagen a nivel global. Pero hay que resaltar el aumento de sus medidas con respecto al modelo anterior. Algo para destacar es que este Golf es exactamente igual al que se fabrica en Europa, por lo que el diseño es seductor y deportivo a la vez.